"Cinco crías de pastor alemán retozan desde hace unos días en casa de James Symington. Los perritos, que en apariencia son iguales a cualquier cachorro juguetón, descienden de otro can, Trakr. Solo que no son sus hijos, son sus clones. Tras los atentados del 11 de septiembre en Nueva York, Symington, un policía canadiense retirado que ahora vive en Los Ángeles, llevó a su perro hasta la Gran Manzana. Trakr era un magnífico rastreador y, según Symington, rescató a la última superviviente del World Trade Center.
Por eso, cuando hace unos meses supo que una empresa californiana organizaba un concurso para clonar a algún animal muy especial decidió proponer a Trakr. «Hay veces en que un perro no solo capta el corazón de los que le rodean, sino que desempeña un papel fundamental en la historia», comenzaba la carta que escribió el ex policía a la compañía BioArts, organizadora del concurso y dedicada a la clonación de mascotas (...)"
Ver aquí.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario