"Un extraño caso de maltrato animal terminó bastante mal para su autor, un joven de 21 años llamado James White. El muchacho, en un estado de total ebriedad, llegó al cuarto que comparte con un compañero de estudio y no tuvo mejor idea que freír el hamster de éste.
A pesar de esta situación, no se sabe con precisión si el animal había fallecido antes de este hecho o como consecuencia del mismo. De acuerdo a los especialistas, esta incertidumbre le evitó la posibilidad de caer en prisión y le abrió otras alternativas para pagar por su accionar.
Por eso, fue condenado al pago de mil libras (unos 1.150 euros), a 120 horas de trabajos comunitarios y a la prohibición de tener animales a su cargo durante ocho años.
Por su parte, desde la Universidad de York, donde ambos asisten y conviven, se ha asegurado a través de un portavoz que no tomará más medidas disciplinarias con el estudiante condenado además de las dictadas por la justicia."
Visto aquí. (Foto explícita)
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