"El jardín del frente de su casa es como la puerta de entrada, por lo que muchas personas se enorgullecen de su mantenimiento.
Denise Thompson, de Edmonton, Canadá, pensaba que tenía un césped hermoso, verde y exuberante. Allí fue donde sus cuatro hijos y dos perros jugaban, y donde tomaban café en las mañanas soleadas.
Pero desapareció misteriosamente, y no sabían porque se lo llevaron. La familia Thompson fue a visitar a su esposo en Stettler, Alberta, el pasado viernes por la mañana.
Regresaron a su hogar en la tarde del domingo, entraron por la puerta de atrás y todo parecía normal, abrieron las persianas del gran ventanal de la sala y.
“¿Dónde está el césped? Oh, Dios mío”, en voz baja se preguntó.
Todo lo que encontró fue una parcela de tierra baldía.
Preguntó a los vecinos si vieron algo raro y dijeron haber visto una camioneta blanca y un remolque estacionado en su casa. Nadie pensó que era sospechoso, porque asumieron que era sólo otro trabajo de paisajismo.
Resulta que estaban en lo correcto, excepto que los jardineros simplemente se equivocaron de casa ...y de calle (...)"
Ver en Solitario George.
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