lunes, 7 de junio de 2010
Un niño de cuatro años cae desde la séptima planta de un hotel y sobrevive sin romperse un hueso
"Suerte o milagro. Un niño de cuatro años ha caído desde una séptima planta sin sufrir heridas graves. El pequeño jugaba en el balcón de un hotel de Miami, en EEUU cuando cayó al vacío. La fortuna quiso que una palma sembrada junto al edificio frenase su caída y amortiguase los resultados del vuelo.
Joey Williams cayó junto al borde de la piscina del hotel desde una altura de 24 metros,según publica el Daily Mail. Tras el vuelo cayó junto a la piscina justo entre las dos barras metálicas de la escalerilla.
En el hospital se quedaron atónitos con el resultado de la caída y en un inicio pensaron que las heridas fueran internas, pero pocas horas después lo descartaron las pruebas médicas.
El pequeño se encontraba tranquilamente bebiendo un batido bajo observación médica.
El vuelo -usualmente mortal- no provocó más que algunos arañazos en un brazo del niño y la inmovilización de su cuello, más por precaución que porque sufriese una lesión real.
El abuelo de Joey contó que su nieto jugaba con una pelota en el balcón cuando ocurrió el incidente que terminó con final feliz."
Ver aquí.
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